Hay varios puntos a tener en cuenta antes de decidirse por un tipo u otro de báscula-puente.
La primera decisión a tomar es el material de la báscula: chapa u hormigón armado.
El criterio más importante para decidir este punto es si existe la posibilidad de desplazar la báscula en un futuro. Por ejemplo, si la báscula va a emplearse en una obra civil y va a tener un uso temporal, se recomienda la selección de una báscula de chapa.
La segunda posibilidad es el tipo de dispositivo de medida: si se desea una báscula mecánica o electrónica. En la actualidad, los dispositivos electrónicos están generalizados y apenas se instalan básculas de romana-impresora.
La tercera disyuntiva es la instalación de la plataforma empotrada o sobresuelo. Las básculas de hormigón mecánicas van instaladas en un foso. Sin embargo, las básculas de chapa mecánicas pueden instalarse también sobresuelo.
Las básculas electrónicas pueden instalarse indistintamente de una forma u otra, aunque es recomendable, siempre que exista sitio para las rampas, realizar una instalación sobresuelo.
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